Amadas hermanas y hermanos en Cristo:
Como pastor en medio del pueblo de Dios, elevo hoy una palabra de aliento y esperanza para todas nuestras comunidades de fe, diversas en forma, pero unidas en espíritu.
Vivimos tiempos en los que el mundo clama por testigos de reconciliación, y es precisamente desde nuestra diversidad católicos, anglicanos, ortodoxos, cristianos evangélicos, y tantos más— que el Señor nos llama a ser un solo cuerpo, una sola familia, un solo pueblo al servicio del Reino.
No estamos llamados a uniformarnos, sino a caminar juntos en el respeto mutuo, escuchándonos con humildad, sirviendo con alegría, y proclamando con una sola voz que Jesucristo es el Señor de todos.
Cada iglesia, con sus dones y carismas, refleja una parte del rostro de Dios. Por eso, en lugar de ver nuestras diferencias como muros, reconozcámoslas como puentes que nos enriquecen y nos enseñan.
Que nuestras manos no se cierren en juicio, sino se abran en abrazo. Que nuestras palabras no dividan, sino sanen. Y que nuestras oraciones, desde cada rincón, se unan como incienso grato ante el trono de Dios.
Porque sólo en el amor seremos creíbles. Y sólo en la unidad, reflejaremos la verdadera gloria del Evangelio.
Con fe, esperanza y ternura pastoral,

DAVID JOAQUIN GUEHENNEC PRETEL
Primer Obispo Indígena Anglicano de Colombia
Rvdmo ++David Joaquín Guehennec
OBISPO
Parroquia Nuestra Señora del Rosario
Primer Obispo Indígena en Colombia
Quibdó - Choco